Se encuentra en el sistema de Cueva Mayor, se accede a ella mediante un pozo vertical de trece metros en lo más profundo se la Sala de los Cíclopes. Esta zona fue visitada por habitantes de las poblaciones cercanas desde el siglo XVI, tal y como muestran pintadas en las paredes, por la gran cantidad de restos de caninos del Ursus deningeri. Gracias a estos restos se empezó a escavar la zona, encontrándose restos humanos muy antiguos del Pleistoceno Medio (530.000 años), en el Cuaternario.
Miguelón |
Al principio fue muy difícil realizar las excavaciones por factores como el difícil acceso, la escasez de oxígeno en el aire y la alteración de los sedimentos por los buscadores de dientes de oso. La sima empezó a estudiarse concienzudamente en 1984, excavándose inicialmente una zona de la parte más profunda de la sima y luego se alternó con un estudio de la rampa que hay en la sima, gracias a lo cual se pudo deducir que los cuerpos habían descendido por ella por culpa de pequeños aludes. En 1992 se encontraron el Cráneo 4 (Agamenón), el Cráneo 5 (Miguelón), que es fósil más completo y mejor conservado que se ha encontrado en el mundo, el cual poseía una gran infección bucal que le habría causado la muerte, y se reconstruyó el Cráneo 6 (Rui). Esto hizo de la Sima de los Huesos uno de los yacimientos de fósiles humanos más importantes. Posteriormente se exhumó la única pelvis (Elvis) prácticamente completa. En catorce años se encontraron 5.500 fósiles humanos, es decir, más que todos los fósiles humanos encontrados en el resto del planeta. En 1994 se encontró un bifaz de cuarcita de color rojo (Excalibur), cuya diferencia a otras es su materia prima, por lo que se cree que era un presente a los enterrados. En 2001 se desenterró el Cráneo 14 (Benjamina), que a pesar de poseer una enfermedad craneal muy grave sobrevivió diez años.
Homo Heidelbergensis |
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